domingo, 18 de abril de 2010

Temo el olor de las mandarinas.

¡Me da pánico!
Tengo miedo de lo que siento, de lo que tengo.
Tengo miedo de lo que puedo perder y de lo que puedo querer.
Tengo miedo de ti.
Me asusta todo esto. Me da terror.
Intento convencerme de cosas.
Intento mentirme, engañarme.
Intento hacerme creer que no lo siento.
Pero... lo siento
¡Lo siento!
Claro, fuerte, aunque me de miedo... aunque me de terror.
Segundas paretes nunca fueron buenas... pero ¿cómo puede fallar sintiendo lo que siento?
Todo lo tuyo me mata.
Te sueño, te siento.
Te necesito, te quiero.

sábado, 17 de abril de 2010

Tu olor a mandarinas

Necesito de tu piel.
Olerte y tenerte ya, aquí, conmigo
Necesito de tus ojos.
Mirarte horas e intentar ganar los duelos de miradas.
Necesito de tus labios.
Besarlos, tocarlos, que sean míos.
Necesito de tu pecho.
Sentir tu respiración agitada, y que tu sientas la mía.
Necesito de tus manos.
Entrelazarlas con las mías, que sean una.
Necesito de tu pestañeo, de tu aliento, de tu pelo.
Definitivamente, te necesito.